Mucho cine argentino para ver, entre los títulos que llegan a la pantalla grande.

El tanque de la semana es Overlord, la película producida por J.J. Abrams que tiene a la Segunda Guerra Mundial como marco. Antes del desembarco de Normandía, unos paracaidistas estadounidenses caen tras la línea enemiga para una misión, pero allí se dan cuenta de que en la aldea, ocupada por los nazis, se llevan a cabo experimentos extraños y bastante siniestros. Terror, supersoldados y lo sobrenatural cruzado con lo bélico, con la dirección de Julius Avery (Son of a Gun).

¿Qué es un palíndromo? pregunta el director Tomás Lipgot, por las calles de Barcelona, en su película ¡Viva el palíndromo! El resultado es una divertida excursión por el universo, que seguramente desconocías, de los fanáticos, a niveles obsesivos por la simetría de las palabras.

Lejos de la diversión, y en el terreno de la ficción, llega otra argentina, Camino sinuoso, dirigida por Juan Pablo Kolodziej con el protagónico de Juana Viale. Ella es Mía, una deportista con carrera truncada por doping que no puede tener hijos con su siniestro marido (Antonio Birabent) y viaja al encuentro de su padre (Arturo Puig) que está grave y con el que tiene una relación difícil.

El muy joven Ángelo Mutti Spinetta es protagonista de Mi mejor amigo, una delicada película de iniciación que viene posponiendo su estreno y por fin encuentra su espacio en la cartelera, mientras que Tiburcio, de Cristian Pauls, se podrá ver en la Lugones. Se trata del regreso del cineasta al pueblo de vacaciones de su infancia, Fortín Tiburcio, cincuenta años después.

Por su parte, Gracias gauchito, de Cristian Jure, se centra en la historia del Gauchito Gil, al que se erigen altares rojos a los costados de las rutas, santo de los desposeídos. Y en el cine Cosmos, un documental de Fernando Molnar habla de arquitectura, como anuncia su nombre: Konstruktion Argentina. Las huellas alemanas en la construcción en Argentina, sigue los pasos de Walter Gropius en la arquitectura argentina, en el marco del centenario de la Bauhaus.

Los nueve estrenos se completan con otro documental argentino, Pañuelos para la historia, de Alejandro Haddad y Nicolás Valentini, y con La vida de Anna, de Nino Basilia, que narra la vida de una madre soltera obligada a tener varios trabajos para mantener a su hijo autista.